«CRUZANDO ESPINAS PARA PLANTAR ROSAS»
Mi hijos me suelen preguntar el por qué decidí formarme como Psicóloga. Yo les suelo contestar que no soportaba ver a un niño llorar indefenso sin nadie que lo abrazara.
Me hice psicóloga porque no podía imaginar ver a una pareja peleando y que él llegara a alzarle la mano mientras ella se encogía de miedo y se ponía de rodillas.
No podía creer que hubiera alguien que no podía entender sus sentimientos y se empezara a hacer daño poco a poco, llegando incluso a cortarse a sí mism@, y que nadie supiera como ayudarle.
Quise intentar cambiar los terribles recuerdos de una violación a esa pequeña joven, la cual apenas podía pegar ojo a las noches.
Deseé ofrecerle mi mano a ese niño maltratado, mostrándole que en el mundo en el que vivimos existe el amor, y él puede llegar a conocerlo.
Quise ser ese instrumento por el cual pudieran abrir la puerta de sus fortalezas, pudieran enfrentarse a la vida por sí mismos sin tenerle miedo a nada ni a nadie…
Llamémoslo llave, llamémoslo guía, pero la Psicología es más que una ciencia que a muchas personas, les salva la vida…
¿ Puede haber profesión más bonita?
-El futuro pertenece a aquellos que tienen el coraje de perseguir sus sueños-
Sara Oneca
Psicóloga Colegiada N-01642
Extracto de mi libro: «Buscando tu propia realidad a través de mi diván, relatos de PsicoVida».



